El enfado, la indignación o el sentimiento de ofensa, no son sentimientos nuevos que hayan aparecido ahora, sino que son inherentes a la propia condición humana. No por nada, ya Aristóteles, hace algún tiempo, dijo esto de:
"Cualquiera puede enfadarse, eso es muy fácil. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y de la forma correcta, eso ciertamente, no resulta tan fácil."
Ni resultaba fácil antes ni... mucho menos ahora. Vivimos en unos tiempos donde parece que hace falta muy poco para que una persona (el ofendidito) se enfade mucho.
Y tengo la teoría (los psicólogos teorizamos todo el tiempo, gajes del oficio) de que esto es así en parte, y solo en parte, por el desarrollo de la tecnología: internet, móviles, redes sociales.
Si el ego es el yo y el yo es la proyección mental de uno mismo (lo que pienso que soy, no lo que soy), mmm... ¿no estarán las redes sociales, al facilitar la exposición continua de mi yo, ayudando a "engordarlo"?
Todos tenemos ego. Es nuestra identidad, quien percibimos que somos, cómo nos vemos y pensamos y también cómo pensamos que nos ven y piensan los demás, pues no puedo separara mi visión del yo de mi visión del mundo. Esto no es bueno ni malo, simplemente es. Pero, ¿a qué me refiero con engordar al yo? A darle al yo una trascendencia que no tiene, a convertirlo en el Gran Centro de ese mundo que visiono y convertirlo a él, y no a mis experiencias y relaciones, en el eje de la vida y la felicidad. Y eso, sí que puede ser malo.
Porque, cuando le doy tanta trascendencia a mi yo, cuando me doy tanta importancia, todo lo que me pase, o todo lo que me digan o todo lo que me hagan, también cobrará mucha importancia, y cuando sea malo, mucha gravedad, y cuando sea un poco más malo que malo, muchísima gravedad, y... Y para entonces, el ofendidito que todos llevamos dentro ya habrá saltado.
Si encima, debido al escaparate de las Redes Sociales, continuamente expongo mi yo a las, por otra parte, continuas opiniones, críticas, comentarios y etc. de gente que me puede importar más, menos o nada, el cóctel explosivo ya está creado.
La receta para volverse inmune a ese cóctel no es abandonar las Redes Sociales (las cuales yo también uso con frecuencia y pienso que, como casi todas las cosas, tienen sus ventajas e inconvenientes... también creo que las utilizamos en exceso pero no me voy a meter, en este post, en ese berenjenal). Estas son algunas ideas para no sufrir el síndrome de los "ofendiditos":
- Aceptar que, en este mundo en el que todos estamos más expuestos que nunca, las malas opiniones, las críticas destructivas, las diferencias ideológicas e, incluso, los ataques verbales gratuitos, forman parte de la experiencia. Aunque parezca fuerte lo que voy a decir: "tienes derecho a que te hagan daño". Por supuesto, no quieres, y deseas que te traten bien porque también tienes derecho a que te traten bien; pero, cuando el otro te haga daño, porque sus palabras o acciones se dirigen directamente hacia ti o porque su forma de pensar o actuar hiere tu sensibilidad, no pienses que no debería estar pasando o tú no deberías estar permitiéndolo, ya que eso solo aumentará tu sensación de ofensa; asúmelo, la realidad es así, no siempre el otro te va a tratar bien. Tras asumirlo, pondera si te conviene actuar o no y cómo, y toma tu decisión.
- No es el otro el que te ofende; eres tú quien se ofende. Eso no quiere decir que si tú quieres eres capaz de no enfadarte. ¡Y un mojón! Todo el mundo se enfada. Pero, también, eres tú el que se desenfada. Y recuerda que sentir emociones no es malo; pero cargar con ellas...
- Humildad. Este es el antídoto del ego, o mejor dicho, del orgullo y la soberbia que nacen del ego. No te creas tan importante. No necesitas ser importante para valorarte y ser feliz. Si crees que haz de ser importante, cualquier comentario negativo que te desmerezca, te hará mucho daño. Si solo te valoras, reconociendo tu ausencia de trascendencia, los comentarios negativos te resbalarán mucho más, precisamente porque te valoras, ya que la mejor manera de darse valor no es otorgándose importancia sino regalándose momentos de felicidad... ¿y quién es feliz ofendiéndose con otros?
Pero, oye, cuestiona todo lo que digo, ya que la duda nos acerca más a la verdad y, además, quién soy yo para creerme poseedor de esta, ¿no?, si solo soy un pringado. Como tú. No te ofendas.
Si te gustó el post y crees que a alguien le puede venir bien para "cambiar el chip", no te lo quedes solo para ti, porfa, compártelo.
Si necesitas mi ayuda para controlar tu ira o conflictividad, u otras problemáticas como la ansiedad, la depresión y las crisis de pareja, te la brindo en consulta en Málaga y online para el resto del mundo.
Y recibe, como siempre, ¡este abrazo!
Se prohíben las injurias y calumnias a cualquier persona o colectivo por razón de raza, sexo, orientación sexual u opinión política, y los mensajes que fomenten el odio por alguna de las razones anteriormente citadas. Del mismo modo, queda prohibido el spam, trolleo, desviaciones del tema propuesto, uso masivo de mayúsculas y enlaces de descarga, además de todo tipo de contenido ilegal.
DOMINGO GUTIERREZ 17/03/2023
No suelo contar cosas personales en las redes sociales pero hoy me veo en la necesidad de haceros partícipes de lo mal que lo estoy pasando. Siempre he sido muy optimista y alegre pero ahora no me veo capaz de afrontar lo que me está sucediendo, le puede pasar a cualquiera por eso tengo que compartir mi dolor, ¿Por qué precisamente a mi? me pregunto cada día, cada día de tristeza, cada día de miradas acusadoras y acosadoras, cada día en el trabajo, cada día en la calle,...es un infierno, necesito ayuda.... Tengo 50 años y tengo alopecia....es un drama....me quiero morir....estoy pensando en dejar el alcohol y pasarme a los antidepresivos, el psiquiatra no me entiende y no da con la solución, mis amigos no me apoyan incluso hacen chistes sobre mi problema, estoy solo, no se donde acabará esto....puede que en lo peor. Pero aún hay esperanza....voy a montar una plataforma reivindicativa, hay un concejal calvo y con un amigo periodista y las redes sociales puedo luchar para que ningún calvo más pasé por esto, lo veo claro, seré el héroe, contaré mi experiencia a todo el mundo y seguramente consiga que algún político calvo (y gilipollas) me apoye y todos juntos conseguiremos una ley que nos asegure una subvención para ir todos los calvos a Turquía (podemos conseguir un descuento por ser tantos) a gastos pagados y con asistencia psicológica, ventajas fiscales y un carnet de ex-calvo discapacitado, sin olvidar penas para los acosadores que hacen que mi vida sea un infierno porque para eso está la Administración y el Gobierno para que con el dinero público de los que tienen pelo se pague el gilipollismo y los caprichos de las minorías....mientras tu te pagas la operación de Miopía, o el dentista o esperas 18 horas en urgencias, los mayores dependientes no tienen asistencia y la gente con enfermedades raras se muere lentamente. Porque esto es un chollazo, después de esto mi próximo proyecto es ir a saco a por la Navidad, a mi no me gusta....voy a crear una plataforma para que nadie pueda celebrar la Navidad...panda de tarados....¿porque tengo yo que soportar lo que diga la mayoría?, aquí mando yo y que se jodan que tengo mis derechos....y tengo muchos partidarios así que seguro que lo conseguimos... Podría continuar escribiendo durante horas pero de verdad que se me revuelve el estómago del asco de sociedad que hemos creado, ilógica, absurda e irreal, incluso bizarra. Gente que demanda al Estado por operarle cuando lo pidió él/ella/elle mismo/a/e y se arrepiente, profesores que dicen que no se puede celebrar el día del padre pq hay familias no convencionales que se va a sentir ofendida, un tío con barba y con un mango de 25 cm que no le puedes llamar Manolo porque es no binario y quiere y exige que le llames María Antonio, le pongas unas alas en la espalda y que le des una palmadita y le digas que es un unicornio , que todos los hombres seamos potenciales violadores y gozamos de privilegios por el mero hecho de existir, que un chaval sea fluido femenino por la mañana y fluido masculino por la tarde y quiere meterse en el vestuario de mujeres con mi hija, competiciones deportivas femeninas donde participan hombres........ Pero ¿cuando acaba esto? si les das todo lo que pide a todo el mundo ¿cual es el final? ¿porque a mi si y a ti no? ¿Por qué le pagas a ese y a mi no?, ¿hay recursos públicos para satisfacer a todos?, ¿Por qué ser normal , buen ciudadano y tener sentido común esta penalizado? ¿PERO A DONDE CARALLO VAMOS?, ¿QUE FUTURO NOS ESPERA? ESTOY HASTA LOS MÍSMISIMOS TESTÍCULOS SEÑORES Y SEÑORAS (no se me vayan a ofender) y si se ofenden que se jodan. Estoy pensando que alguien debería de fundar el partido político de la gente sensata, normal y con lógica y sentido común porque mi voto lo tendría desde luego. Lo absurdo que es ofenderse simplemente por el hecho de que alguien no pertenece a nuestro grupo pero más absurdo es que desde el gobierno se apoye todo esto porque si abres la puerta a uno tienes que abrirla al otro , y al otro más y eso no tiene límite. Esto tiene que parar ya, cuanto antes, a los problemas que ya todos conocemos como desempleo, deficiencias en el sistema sanitario, educativo, de Justicia y Pensiones estamos sumando un 40% de españoles con problemas de salud mental y una cultura del gilipollismo ofendidito que ha calado mucho en una juventud (y otros no tan jóvenes que ya eran gilipollas) alentada por gobiernos y políticos que solo piensan en votos, medios de comunicación en busca de audiencia fácil y unas redes sociales que son altavoces de la estupidez humana....FALTAN VALORES, SENTIDO COMÚN Y RACIONALIDAD. CENTRARSE UN POQUITO antes de que sea tarde porque al igual que a un niño catalán le han convencido tras 20 años de TV y colegio de que España es mala a nuestra sociedad la han convencido de que es gilipollas y ofendidita. Estoy tan quemado con este tema que hasta voy a cambiar mi foto de perfil.